¿Pueden los envases plásticos ser una opción positiva para el medioambiente?

StePac desarrolla envases contra el desperdicio alimentario, que combinan las tecnologías de atmósfera y humedad modificadas  

Relación entre el envasado plástico y la reducción del desperdicio de alimentos

La Sociedad demanda cada vez menos envases plásticos por su alto impacto medioambiental. No obstante, su retirada total podría conllevar a un aumento del desperdicio de aquellos alimentos más perecederos y sensibles. Según datos de la FAO, el 50 % de los alimentos que se producen en el mundo acaban perdiéndose o desperdiciándose a lo largo de la cadena de suministro. Además, se ha contabilizado que este desperdicio es responsable de, aproximadamente, el 8% de todas las emisiones de gases de efecto invernadero. En este contexto, una opción sería apostar por la fabricación y uso de envases plásticos lo más ecológicos posibles, que nos ayuden a prolongar la vida útil de los productos frescos y reducir, así, el desperdicio. STEPAC lo ha conseguido mediante el desarrollo de envases de atmósfera y humedad modificadas (AM / HM) que retrasan los procesos de maduración y senescencia de las frutas y hortalizas, inhibiendo la acción de los microorganismos y conservando su valor nutricional y características organolépticas. Las propiedades de los films plásticos para modificar la humedad reducen la deshidratación y la pérdida de peso, al mismo tiempo que evitan la acumulación de agua libre en el envase. Como resultado, se consigue prolongar la vida útil de las frutas y hortalizas, reduciendo el desperdicio en todo el mundo.

El paradigma de la sostenibilidad de StePac

StePac promueve un enfoque basado en cuatro pilares para reducir la huella medioambiental de los envases de plástico. Los principios son sencillos: usa envases de plástico solo cuando: 1. Es realmente necesario, como para evitar el desperdicio de alimentos. 2. Produce una reducción en la emisión de gases de efecto invernadero 3. Es un plástico lo más fino posible 4. Apuestes por una economía circular con envases reciclables mecánicamente. Si el reciclaje mecánico no es factible, adopta el reciclaje químico.