Si me quieres, en San Valentín, dame calabazas

Los mercados y fruterías de España se llenan de calabazas

Una cara conocida para cada tipo de amor

¡En San Valentín demuestra tu amor dando calabazas! Esta es la campaña que ha puesto en marcha Love Klabaza para promocionar el consumo de calabaza durante todo el año. Con este objetivo, ha impulsado varias acciones en mercados mayoristas, fruterías y redes sociales. “La campaña anima a los consumidores a dar calabazas a su ser más querido. Amor de padre, amor de mascota, amor de suegra, amor de amiga… Hay tantos tipos de amor como personas y, por tanto, como influencers. Por eso, hemos elegido perfiles que representan cada tipo de amor para que nos ayuden a visibilizar en redes sociales los beneficios y las maneras de cocinar la calabaza” indica Cari Plaza, portavoz de la campaña. Asimismo, todos aquellos consumidores que se unan a esta iniciativa y compartan su amor por Instagram con el hashtag #simequieresdamecalabazas pueden ganar una experiencia romántica gourmet. La campaña, que se ha realizado tanto en España como en Portugal, llega también a fruterías y mercados mayoristas que han cambiado el típico color rojo por el naranja y han repartido a sus clientes material promocional e información sobre el producto. “El objetivo es que despertar la curiosidad del consumidor y que descubra la versatilidad que tiene la calabaza en la cocina. Hay un mundo de posibilidades además de las cremas” añade Cari Plaza.

¿Qué es Love Klabaza?

Love Klabaza es una iniciativa de los productores de España y Portugal, junto con la empresa de semillas SAKATA SEED IBÉRICA, para promocionar el consumo de calabaza. Tanto en la web www.loveklabaza.com como en redes sociales, el consumidor puede acceder a vídeo tutoriales, recetas, consejos y curiosidades. En la actualidad, España y Portugal son dos de los mayores productores y exportadores de calabaza de Europa. Además de sus grandes beneficios nutricionales y culinarios, estamos ante un producto de proximidad que tiene una buena conservación y se puede consumir todo el año, lo que reduce el impacto ambiental y la dependencia de países del hemisferio sur para su exportación.