Pampols dispone de un amplio surtido de bolsas MAP, clasificadas según el tipo de fruta o verdura que se desee envasar, en función de sus propiedades intrínsecas de agua, composición, peso o ritmo respiratorio
En un mercado cada vez más globalizado y exigente, la tecnología juega un papel protagonista para la alargar la vida útil de los alimentos frescos.
Un buen ejemplo de ello son las bolsas de atmosfera modificada, una solución de envasado que se ha tecnificado y perfeccionado en los últimos años. Las bolsas de atmosfera modificada o MAP (del inglés Modified Atmosphere Packaging) se basan en una
tecnología que permite el intercambio de los gases que se producen dentro de un envase sellado. Esta técnica de envasado consigue mantener el sabor, apariencia y textura del alimento contenido, e inhibe la pérdida de peso.
La principal ventaja de este tipo de bolsas es
preservar la calidad y la frescura de los alimentos, siendo ideales para la exportación y el transporte de productos frescos en contenedores reefer o camiones frigoríficos. En el caso concreto de las frutas y hortalizas frescas, desde
PAMPOLS creen que su utilización es fundamental porque una vez cosechadas, a diferencia de otros alimentos, siguen consumiendo oxígeno y produciendo dióxido de carbono y vapor de agua.
Disponen de un amplio
surtido de bolsas MAP, clasificadas según el tipo de fruta o verdura que se desee envasar, en función de sus propiedades intrínsecas de agua, composición, peso o ritmo respiratorio. Cada producto fresco tiene un protocolo de envasado y almacenaje que es aconsejable seguir.
¿Cómo funcionan las bolsas MAP?
Las bolsas MAP crean una
atmósfera protectora equilibrada (EMA, de sus siglas en inglés), que compensa la cantidad de oxígeno y dióxido de carbono que se mantiene en el interior de la bolsa, en función de las características del alimento envasado.
En términos generales, esta atmósfera adecuada se consigue elevando los niveles de CO₂ y reduciendo los de O₂ para disminuir el ritmo de respiración de la fruta o vegetal almacenado.
Las bolsas MAP incorporan una
película semipermeable formada por moléculas inteligentes, que posibilitan la entrada de oxígeno en la bolsa (a través de microperforaciones) y compensan, de esta forma, el oxígeno que consume la propia fruta o verdura. A su vez, estas moléculas compensan la presencia de dióxido de carbono y mantienen los niveles de humedad necesarios.
Otra ventaja de la atmósfera protectora es la reducción de la sensibilidad de las frutas y hortalizas a la acción del etileno, un gas producido de forma natural por estos alimentos y que acelera su proceso de maduración.
El equipo de PAMPOLS
puede asesorarle técnicamente para escoger el tipo de bolsas MAP más adecuada para sus productos, tras evaluar sus necesidades de embalaje y transporte.
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