La atmósfera controlada dinámica con un nivel mínimo de oxígeno preserva la calidad de las manzanas almacenadas a largo plazo

Las estrategias de tratamiento poscosecha son cruciales para mantener la calidad y ampliar la vida útil de los productos hortícolas. La longevidad de ciertos cultivos almacenados generalmente se logra con procedimientos de enfriamiento o tecnologías como el uso de 1-MCP (1-Metilciclopropeno) como alternativa para la fruta producida orgánicamente. pero pueden prolongarse aún más, optimizando la composición de la atmósfera del ambiente de almacenamiento durante todo el período hasta la comercialización.

Hay frutas que por su fragilidad y valor agregado exigen, y es sumamente importante, el almacenamiento a largo plazo, asegurando la calidad para su distribución al mercado. Frutas como manzana, pera, kiwi etc. tienen una cosecha estacional y una vez recogidas, tienen una vida útil relativamente corta. Los tratamientos de almacenamiento en Atmósfera Controlada Dinámica permiten que la fruta alcance un grado muy alto de hibernación, lo que significa que puede almacenarse durante casi 12 meses.

Para conseguirlo deben controlarse los niveles de respiración del fruto (consumo de oxígeno y liberación de CO2), regulando así su maduración, y tras el largo periodo de almacenamiento, obteniendo un producto con las mismas características de calidad que poseía en el tiempo de la cosecha. Por otro lado, las altas concentraciones de CO2 provocan daños en los mismos, por lo que hay que restringirlo eliminando el exceso.

La tecnología de atmósfera controlada con ajustes dinámicos adaptados a los requisitos específicos de los productos vegetales de acuerdo al genotipo, fenotipo y edad ha mostrado resultados positivos muy significativos.

La Atmósfera Controlada Dinámica (DCA) es un sistema en evolución continua, basada en diversos conceptos fisiológicos, que implica la regulación activa de las condiciones del ambiente para optimizar la preservación de la fruta poscosecha durante el almacenamiento.

El nivel de oxígeno es un parámetro fundamental de atmósfera dinámica controlada. La reducción de la concentración de oxígeno en el medio ambiente reduce la respiración junto con el metabolismo en general, manteniendo la calidad de los productos almacenados. 

Para la conservación de la calidad de los frutos de manzana (Malus X domestica) se ha utilizado un nivel mínimo de oxígeno, estudiando el efecto en función de la respuesta dada por la fluorescencia de la clorofila (CF).

En la clorofila se producen cambios repentinos, como consecuencia de las alteraciones metabólicas, por ejemplo, tasas de respiración reducidas, maduración retrasada, pardeamiento enzimático minimizado etc.

Esta herramienta biotecnológica permite la detección de variaciones de las frutas (inclusive la contaminación microbiana) en tiempo real, lo que permite el ajuste dinámico de las condiciones atmosféricas.

Fuentes

From static to dynamic controlled atmosphere: enhancing long-term quality preservation of apple fruits through storage at the lowest tolerated oxygen level
Angelo Zanella, Stefan Stürz, Nadja Sadar
Research Centre Laimburg, 39040 Ora (Posta), Italy
European Horticulture Congress, 12-16 May 2024, Bucharest, Romania

Imagen, Stahl Ingeniería, instalación de Isolcell 

Más información

Fons, E. et al. (2017) La fluorescencia como técnica de prevención de daños en conservación de fruta en bajo oxígeno. Biblioteca de Horticultura