Los envases inteligentes son un punto de encuentro entre las tecnologías de la información, el big data, la bioingeniería, la nanotecnología, la inteligencia artificial y la geolocalización al servicio de la logística, el packaging y el ecodiseño
¿Qué es el packaging inteligente?
El
smart packaging, también conocido como packaging inteligente, envase inteligente o embalaje inteligente es aquel
packaging que añade características, funcionalidades y prestaciones extras de valor añadido a las que aportaría un embalaje convencional.
No olvidemos que la principal función del embalaje es la de
proteger el contenido de golpes, inclemencias del exterior y hasta de robos.
La protección en el smart packaging cumple todo eso y, además, interactúa con el exterior. Es decir, informa si un paquete ha estado sometido a altas temperaturas que hayan podido comprometer su calidad. O permite localizar el almacén donde se producen robos.
Tecnologías de los envases inteligentes
Algunas de las tecnologías que ya se aplican a este tipo de envases son las siguientes:
- Indicadores de temperatura-tiempo (TTI). Informan a que temperaturas se ha expuesto la mercancía y durante cuánto tiempo.
- Sensores de humedad o gas. Permiten conocer las condiciones de humedad interior, composición de la atmósfera modificada o si hay aumento de etileno que pueda acelerar la maduración.
- Biofilms indicadores de degradación. Cambian de color según el estado del producto, advirtiendo del fin de su vida útil.
- GPS y RFID. Los sistemas de geolocalización y las etiquetas de identificación por radiofrecuencia informan en tiempo real de la localización del paquete para un tracking pormenorizado.
- Blockchain. Es un sistema transparente e inviolable que proporciona información encriptada desde el emisor al receptor. Garantiza el origen y la veracidad de los datos. Por ejemplo, garantiza si un producto es ecológico de verdad o se han usado fitosanitarios que hacen que no lo sea, a qué hora ha salido de almacén, cuánto pesa en origen, por dónde va, temperatura, si hay retrasos…
- Nanotecnología. Incorpora enzimas u otras sustancias que reaccionan ante la presencia de bacterias patógenas, hongos…
Logística inteligente: qué es y para qué sirve
Acabamos de ver que el packaging inteligente nos permite recopilar mucha información en torno a un paquete. Podemos saber su ubicación, cuánto pesa, en qué estado está la carga interior en todo momento o cuánto falta para que llegue a su destino.
Así nace la logística inteligente, que podríamos definir como la
aplicación de las tecnologías de la información,
el Internet de las cosas (IoT), el blockchain o el big data para optimizar los procesos logísticos.
Todos estos términos soltados de golpe pueden abrumar, pensar que ‘esto no es para mi empresa’. Sin embargo, es bastante más sencillo si lo vemos con ejemplos.
Un caso de empresa que se beneficiaría de la logística inteligente es un distribuidor de última milla que emplea embalajes con geolocalizadores conectados a un sistema de información del tráfico. Así puede modificar las rutas en tiempo real para esquivar los atascos.
El blockchain aplicado al sector logístico de la alimentación hace posible, por ejemplo, conocer en qué momento se ha envasado un alimento, cuándo ha salido del almacén, a qué temperatura ha salido y si ésta sufre alteraciones a lo largo del trayecto.
Esta información es de máximo interés tanto para el que envía, como para el receptor. Éste puede, por ejemplo, avanzar su producción sabiendo que el envío le va a llegar a una hora determinada.
Por ejemplo, comprometerse a enviar tartas de manzana si sabe que la fruta va a llegar a lo largo de la mañana.
La
smartbox Komebac Cool® de
KNAUF INDUSTRIES permite incorporar dispositivos blockchain para trackear todo el proceso logístico.
Estos
contenedores isotérmicos se fabrican en polipropileno Expandido (EPP) y son compartimentables con espacios a distintas temperaturas. Son perfectos para el transporte de última milla.
Sigue leyendo sobre tipos y beneficios de los envases inteligentes