En los últimos años, ha habido un incremento de la demanda, por parte del consumidor, de frutos de bayas en Europa. Sin embargo, la producción del cultivo se ve afectada tanto por los cambios medioambientales asociados al cambio climático, así como la preservación del medio ambiente. Este hecho hace que sean necesarios nuevos sistemas de cultivo. Los cultivos de baya tienen una limitada tolerancia a la contaminación que es determinante en la plasticidad de la planta a diferentes factores medioambientales. Ello afecta, además, a la calidad del fruto, factor importante que determina el éxito o no en el mercado de estos frutos ante el consumidor.
Por ello, un grupo de investigadores del IHSM La Mayora CSIC-UMA participan en el proyecto “BreedingValue”, dotado con 7 millones de euros, que tiene por objetivo el desarrollo de nuevas estrategias de cultivos para obtener bayas mejor adaptadas a cambios en el medioambiente, así como frutos con mejores propiedades nutricionales y organolépticas. Se pretende tener un mejor conocimiento a nivel molecular de los mecanismos adaptativos de la planta a los cambios medioambientales, así como conseguir mejor calidad del fruto. El trabajo se desarrollará en tres especies, fresa, frambuesa y arándano. BreedingValue cuenta con la colaboración europea de veinte socios de ocho países diferentes, una iniciativa multidisciplinar que pone en valor las diferentes colecciones de germoplasma “GenRes de fresa, frambuesa y arándano disponibles a nivel europeo". El trabajo de este proyecto estará coordinado en los próximos cuatro años por la Università Politecnica Delle Marche en Ancona (Italia). El grupo de trabajo liderado por Sonia Osorio va a aplicar nuevas herramientas de fenotipado tanto a nivel de planta como de fruto que permitan desarrollar modelos de predicción en cuanto a mejor adaptación de la planta a cambios en el medioambiente, así como mejor calidad de fruto. Fuente: IHSM La Mayora