Aplicación de ozono para el tratamiento de las aguas residuales de los almacenes de cítricos

Gruper O3 apuesta por sistemas de depuración sostenibles, con bajos o nulos costes de explotación, usando tecnologías limpias como el ozono para el tratamiento de las aguas residuales de las centrales hortofrutícolas

Los vertidos industriales constituyen uno de los daños potenciales al medio ambiente. Por ello, en los últimos años, se ha avanzado mucho en la concienciación de las empresas al respecto y, también, en la tecnología disponible para evitarlos o minimizarlos. En la Comunidad Valenciana, los incidentes por vertidos inadecuados tienen en parte como origen las centrales hortofrutícolas, aunque no son los únicos. Estas generan incidentes con una estacionalidad coincidente con la campaña y se caracterizan por la presencia de fitosanitarios. En el periodo 2016-19, se encontraron valores por encima de lo autorizado en un 53% de los 146 establecimientos inspeccionados y en la última campaña incumplieron el 38% de los 120 establecimientos inspeccionados.

Qué es el ozono y qué ventajas presenta

En la actualidad, existen diversas tecnologías para el tratamiento de las aguas residuales. Entre ellas, destaca el ozono que se caracteriza por ser el tercer oxidante más potente por debajo del flúor y el radical hidroxilo. Se trata de una molécula compuesta por tres átomos de oxígeno que se genera por la disociación de los dos átomos que componen el gas oxígeno como consecuencia de una descarga eléctrica o por la radiación ultravioleta. Cada átomo de oxígeno liberado se fija a otra molécula de oxígeno gas (O2), formando las moléculas de ozono (O3). A nivel industrial el ozono se obtiene mecánicamente, mediante lámparas de ozono o sistemas de plasma. En el caso de las centrales citrícolas, el ozono generado se inyecta mediante Venturi al depósito de agua, que a través de una recirculación, va degradando la materia orgánica y los fitosanitarios provenientes de las diferentes etapas de manipulación y acondicionamiento de la fruta. En el diseño del equipo, se tienen en cuenta varios factores: los fungicidas utilizados, los puntos del almacén donde se genera toxicidad, el tipo de uso que se hace del agua (por ejemplo, si el destrío se evacúa mediante agua), así como el uso al que se somete el agua, que puede requerir un pretratamiento fisicoquímico previo a la ozonización. Entre las ventajas de la aplicación de ozono para el tratamiento de aguas residuales, destacan: - Efecto bactericida, viricida y fungicida - Rápida acción incluso a bajas concentraciones - Bajo coste - Facilidad de aplicación - Reutilización de las aguas tratadas y consiguientes ventajas económicas y medioambientales - No genera residuos

Soluciones de Gruper O3 para el tratamiento de aguas residuales

GRUPER O3 desarrolla y aplica las más modernas tecnologías en filtración, depuración y sanitización, para cualquier tipo de agua residual e industrial. Somos especialistas en el tratamiento y reutilización de aguas residuales del sector agroalimentario con sistemas de ultrafiltración, homogenización, decantación, hidrólisis y ozono para su posterior vertido. Se trata de sistemas de depuración sostenibles, con bajos o nulos costes de explotación y apostando por el uso tecnologías limpias. Para ello, la empresa se desplaza a las instalaciones de sus clientes con un laboratorio móvil para determinar el problema y ofrecer una solución a medida y con las máximas garantías de éxito. El equipo participa activamente en todas las fases del proyecto: - Desplazamiento de técnico especializado - Análisis in situ del problema - Presentación de soluciones - Diseño solución final - Fabricación, montaje y puesta en marcha - Explotación De esta forma Gruper O3 aporta soluciones técnicas, funcionales y económicamente viables específicas y óptimas para los clientes y permite cumplir siempre con los requisitos de las distintas administraciones.