Los tratamientos con sales de metabisulfito de sodio y metabisulfito de potasio reducen la podredumbre marrón y podrían tener interés como nuevas herramientas para el control integrado de esta enfermedad de la fruta de hueso
Dentro de su línea de investigación dedicada al control integrado no contaminante de enfermedades de poscosecha (CINCEP) de productos hortofrutícolas para el consumo en fresco, el Centro de Tecnología Poscosecha (CTP) del IVIA ha evaluado nuevos tratamientos con aditivos alimentarios a base de azufre para el control de las principales podredumbres causantes de pérdidas económicas en la fruta de hueso. Estas son las podredumbres marrón (o parda), blanda (o acuosa) y amarga (o ácida), causadas respectivamente por los hongos patógenos Monilinia spp., Rhizopus stolonifer y Geotrichum candidum. Los resultados obtenidos con estos aditivos, clasificados también como sustancias reconocidas como seguras (GRAS) por la legislación estadounidense, han sido publicados recientemente en abierto (Open Access) en la prestigiosa revista internacional Foods dentro del Número Especial "Postharvest Quality and Control of Microbial Decay in Horticultural Produce", cuyos editores invitados son el Dr. Manuel Serradilla (INTAEX-CICYTEX, Badajoz), la Dra. M. Carmen Alamar (Cranfield University, Reino Unido) y el Prof. Lluís Palou (CTP, IVIA).
En pruebas in vitro con placas de Petri con medio agar patata dextrosa (PDA) modificado con diferentes concentraciones (0, 10, 20, 30, 50 y 100 mM) de las sales metabisulfito de sodio (SMBS, E-223), metabisulfito de potasio (PMBS, E-224), sulfato de aluminio (AlS; E-520) y sulfato de aluminio y potasio (AlPS, E-522), se observó que SMBS y PMBS a todas las concentraciones, AlS a concentraciones superiores a 20 mM y AlPS a concentraciones superiores a 30 mM, inhibieron completamente el crecimiento radial de los tres hongos tras 10 días de incubación a 25 ºC. En pruebas primarias de selección in vivo con nectarinas inoculadas artificialmente con M. fructicola (Fotografía A), G. candidum (Fotografía B) o R. stolonifer (Fotografía C), las soluciones acuosas de las cuatro sales redujeron la incidencia y la severidad de la podredumbre marrón a concentraciones de 10 y 50 mM, mientras que solo AlS y AlPS redujeron la podredumbre blanda, y ninguna de las sales fue eficaz contra la podredumbre amarga. Las soluciones a 100 mM fueron fitotóxicas y dañaron la piel de la fruta. En ensayos de baños a pequeña escala, los tratamientos de 1 min en soluciones de SMBS o PMBS a 10 mM y temperatura ambiental (20 ºC) redujeron significativamente la incidencia y la severidad de la podredumbre marrón tras 8 días de incubación a 20 °C. Por el contrario, los baños en soluciones de AlS o AlPS no redujeron las podredumbres marrón y blanda.
Estos resultados ponen de manifiesto que tratamientos de poscosecha con los aditivos alimentarios SMBS y PMBS, aunque no presentan una elevada eficacia aplicados solos, sí reducen la podredumbre marrón y podrían tener interés como nuevas herramientas de CINCEP en programas diseñados para el control integrado de esta enfermedad de la fruta de hueso. En cambio, los aditivos alimentarios a base de azufre no presentaron interés para el control de las podredumbres blanda y amarga en nectarinas.
Esta investigación ha sido llevada a cabo por el equipo formado por la Dra. V. Martínez-Blay, Dña. V. Taberner y la Dra. M.B. Pérez-Gago, con la colaboración del estudiante visitante mexicano Gael F. García-Merino y bajo la coordinación del Prof. Lluís Palou y lleva por título "Postharvest treatments with sulfur-containing food additives to control major fungal pathogens of stone fruits". La financiación se ha obtenido a través del programa europeo PRIMA, financiado en España por MCIN/AEI/10.13039/501100011033 y por la Unión Europea "NextGenerationEU/PRTR" (proyecto StopMedWaste - PCI2020-112095).
Pueden acceder a más información sobre esta publicación en ReDivia, el repositorio institucional del IVIA