Decco Ibérica cuenta con un amplio catálogo de productos para proteger la poscosecha de cítricos y otras frutas
Existen numerosos tipos de problemas causados por
virus, bacterias y hongos. De hecho, los organismos patógenos se cuentan entre los principales causantes de enfermedades vegetales. Especialmente importantes pueden ser en la
poscosecha, momento en el que el almacenamiento y las condiciones de conservación pueden generar el
ambiente adecuado para su proliferación
. Conocer los
principales tipos de patógenos que pueden afectar a la cosecha nos ayudará a prevenir daños y pérdidas innecesarios.
¿Por qué es importante conocer todos los tipos de patógenos?
Existen miles de agentes patógenos que atacan a la cosecha. Sin embargo, no todos tienen la misma importancia. Es más, no todos provocan el mismo impacto. Por ello es necesario conocer cuales provocan ciertas
enfermedades y cómo funcionan estas, con el fin de poner los medios adecuados para reducir el daño que provocan. Entender las causas nos ayudará a enfrentarnos a estas cuestiones con mayor eficacia.
Causas de las pérdidas durante la postcosecha
Las pérdidas por postcosecha hacen referencia a aquellos frutos desperdiciados o en mal estado para el consumo que se producen entre la recolección y la llegada al punto de venta y suelen representar
entre un cinco y un 25% de las cosechas. En términos generales las
causas primarias de pérdidas se distinguen entre:
Mecánicas: debidas a impactos, cortes, caídas, roces, o desgarros.
Medioambientales: provocadas por la exposición a condiciones climatológicas como las heladas, el granizo, el sobrecalentamiento o la deshidratación dan lugar a grandes daños.
Fisiológicas: comprenden desde las alteraciones originadas por la respiración y la transpiración de las frutas y las verduras, hasta la aparición de raíces, su envejecimiento antes de ser recogidas o las brotaciones.
Químicas y bioquímicas: incluyen la aparición de toxinas y las contaminaciones a causa de productos químicos y pesticidas, así como en cultivos de raíces la oxidación fenólica.
Biológicas y microbiológicas: Provocadas por plagas y otras enfermedades que minan la salud de los cultivos, en especial en algunas épocas del año.
Aunque, como vemos, existen muchas razones, las
biológicas y microbiológicas (aquellas que se deben a los microorganismos patógenos) se encuentran entre las mayores causantes del desperdicio.
Tipos de patógenos en postcosecha
Los
microorganismos patógenos postcosecha más importantes, relativamente general y alto impacto, son los siguientes:
Phytophthora citrophthora: este hongo causante de un podrido de aspecto marrón y sabor agrio. Esta infección se origina en el campo y la lluvia actúa como vehículo conductor, afectando sobre todo a los frutos más bajos del árbol.
Rhizopus nigricans: este hongo es el que mayor incidencia presenta en las frutas de hueso, siendo el causante de numerosas pérdidas postcosecha debido a la degradación que origina en frutas y verduras.
Botrytis cinerea: la podredumbre gris es una de las enfermedades por hongos con más efecto negativo en las cosechas. Ataca especialmente al final de la floración y cuando el fruto madura, por lo que representa pérdidas muy importantes para los cultivos.
Phomopsis: la Phomopsis es una enfermedad provocada por
Phomopsis spp. y que afecta principalmente a los cultivos de almendro, melocotonero, nectarina y albaricoquero, así como a los viñedos.
Patógenos postcosecha en cítricos
Entre los microorganismos patógenos poscosecha, los que afectan a los
cítricos tienen especial relevancia por la enorme cantidad de frutas a las que pueden afectar rápidamente, estropeando naranjas y limones, entre otros, de forma devastadora.
Diplodia sp este género de hongos anamórficos se caracteriza por producir una lesión con una coloración marrón o negra que se da alrededor del pedúnculo y porque la zona afectada, con podredumbre, adquiere una textura blanda.
Alternaria citri: es un tipo de podrido muy frecuente en limones o naranjas y su infección se efectúa cuando las esporas de este hongo se transportan por el viento y penetran en los frutos cuando estos están germinando.
Penicillium digitatum, el moho verde, y
Penicillium italicum, el moho azul: estas son dos de las enfermedades postcosecha más habituales, responsables del podrido de los cítricos.
Geotrichum candidum: este hongo se enmarca dentro de los agentes externos que pueden dar lugar a la degradación, podredumbre, malos olores y pérdida de sabor de la cosecha.