Decco Ibérica analiza algunos aspectos importantes sobre la poscosecha de esta variedad de interés mundial
El almacenamiento en cámara frigorífica de la naranja Valencia Late se hace para ampliar su rango de comercialización y de esta manera se pretende regular la venta de esta variedad. Esta práctica de postcosecha para alargar su comercialización tiene que hacerse con sumo cuidado sin afectar por ello la calidad interna del fruto.
Probablemente es la más conocida y cultivada del mundo, lo que hace de la naranja
Valencia Late una de las frutas de
mayor interés a nivel global. Este cítrico tiene unas características especiales que también afectan a su conservación.
DECCO IBÉRICA presenta, en el siguiente artículo, algunos aspectos relevantes sobre su poscosecha.
Características de la naranja Valencia Late
Como su nombre indica, esta es
una naranja tardía, apareciendo desde
finales de marzo hasta finales de junio, según la zona y el clima. Las Valencia Late tienen un zumo muy abundante cuya acidez va bajando con el tiempo y sus azúcares aumentan. Sin embargo, probablemente su característica más importante es, precisamente, que sea la última de la campaña.
De
tamaño menor que otras variedades, tiene una forma redondeada ligeramente alargada. La corteza es delgada, lisa, a veces ligeramente granulosa y de color anaranjado, pero más claro que otras variedades. La pulpa es muy jugosa, algo ácida, pero dulce
. Una de las características más atractivas es que
no tiene apenas pepitas en la pulpa. Tiene una piel dura, y suele orientarse a producir zumo y para abastecer durante el verano de fruta del hemisferio norte a este mismo hemisferio.
Particularidades en la conservación de naranja Valencia Late
Antes de abordar la conservación de las Valencias, resulta indispensable revisar primero los Planes de limpieza y Desinfección, comprobar que está todo en regla y entonces implementar una limpieza y desinfección en profundidad de la línea de tratamiento, el suelo del almacén, las cámaras frigoríficas y por último los envases.
Además, se debe ser muy exigente y cuidadoso con la selección y escoger los frutos de mayor calidad para la conservación, de no ser así nos arriesgamos a sufrir pérdidas durante el periodo de la postcosecha.
El momento de la poscosecha de la naranja es complicado y está directamente relacionado con la
temperatura. El frío puede estropear tanto la piel como la calidad interna de la fruta, por lo que es esencial mantenerla en condiciones bien controladas. En términos generales, podemos decir que cada una de las variedades tiene una
temperatura óptima de almacenamiento, así como un tiempo recomendado tras el cual comienza a perderse la calidad en el estado de la fruta. Para las naranjas Valencia Late
las condiciones son:
- Temperatura: 3-5 ºC
- Tiempo de almacenamiento poscosecha: Entre 2 y 3 Meses
- Humedad relativa alrededor de 90%
- CO2: 0.2-0.3% máximo
Es imprescindible que en la cámara de almacenamiento mantengamos una
humedad relativa constante. La renovación de aire debe asegurar que el nivel de etileno sea inferior a 1 ppm para evitar la senescencia del fruto. Los frutos recolectados a principio de su época de recolección son, en general,
más sensibles al frío, al igual que ocurre con los más pequeños, con los que las pérdidas de agua por transpiración son más probables. Normalmente, las pérdidas de firmeza de la piel se correlacionan bien con las pérdidas de agua por transpiración, provocando la pérdida de valor comercial y la pérdida de la protección de la corteza.