La poscosecha es una etapa crítica en la cadena de suministro agrícola, donde la calidad y la seguridad de los productos pueden determinar el éxito o el fracaso de toda la cosecha. Imagina poder mantener tus frutas y verduras frescas por más tiempo, libres de patógenos y sin residuos químicos.
El ozono es la clave para lograrlo. Su potente acción biocida elimina bacterias, virus y hongos sin alterar las propiedades organolépticas de los alimentos. Esto significa productos más frescos, seguros y de alta calidad para tus consumidores.
El ozono en el aire de cámaras de almacenamiento y transporte crea una barrera protectora contra microorganismos. Inhibe la proliferación de patógenos y prolonga la vida útil de los alimentos, reduciendo pérdidas y aumentando beneficios. Además, elimina el etileno, controlando la maduración de frutas climatéricas y manteniéndolas frescas por más tiempo.
Otro uso clave es la alta desinfección en seco para frutos delicados como frambuesas, moras y arándanos, que no se pueden lavar antes del envasado.
Los túneles de ozono diseñados por Cosemar Ozono desinfectan en menos de 30 minutos, preservando sabor, valor nutricional y color.
El agua ozonizada es insuperable para el lavado de frutas y verduras. No solo desinfecta de manera efectiva, eliminando plaguicidas y patógenos, además, el ozono asegura la eliminación de residuos plaguicidas, ofreciendo una solución segura y respetuosa con el medio ambiente.
A diferencia del cloro, el ozono no deja subproductos tóxicos, como cloraminas o trihalometanos, y no genera residuos que afecten el medio ambiente.
Estos dispositivos, alimentados por baterías, actúan como bactericidas y fungicidas, manteniendo el aire en el interior de las cámaras de transporte esterilizado y libre de contaminantes. Esto no solo prolonga la vida útil de los alimentos, sino que también garantiza su calidad higiénico-sanitaria durante todo el proceso de transporte.