Los consumidores actuales demandan frutas maduras y listas para el consumo durante todo el año. Para garantizar este nivel de calidad, el proceso de maduración de frutas como plátanos, aguacates, mangos y otras frutas tropicales debe replicar las condiciones óptimas para su desarrollo natural.
La maduración se basa en la generación de un flujo de aire uniforme, asegurando que los frutos maduren de manera progresiva y homogénea dentro de un espacio confinado.
Estos espacios están equipados con enfriadores de aire de gran superficie de intercambio, lo que minimiza la deshidratación y la pérdida de materia prima. El ciclo completo de maduración se realiza en un periodo de 3 a 5 días.
Clauger diseña soluciones personalizadas para la maduración de frutas, combinando tratamiento de aire y producción de energía con un enfoque sostenible.
Nuestra experiencia en refrigeración nos permite desarrollar instalaciones eficientes y respetuosas con el medio ambiente, utilizando fluidos naturales como NH₃ y CO₂, y optimizando el consumo energético para reducir el impacto ambiental.
Clauger garantiza frutas listas para comer con un proceso preciso, eficiente y ecológico.