Diseñar, aplicar y mantener un buen plan de Limpieza y Desinfección (L+D) durante toda la campaña es de vital importancia. El mantenimiento de la higiene en la central ofrece numerosos beneficios, tales como:
- Disminuir la cantidad de inóculo fúngico presente en todas las zonas del almacén, ya que existe una relación directa entre el número de esporas y el porcentaje de infecciones.
- Reducir el riesgo de aparición de resistencias a fungicidas.
- Eliminar cualquier reservorio de esporas resistentes. Cuando hay resistencias, disminuye la eficacia de los fungicidas, lo que incrementa los porcentajes de podrido.
- Mejorar las condiciones de trabajo, ya que en un ambiente higiénico se reduce el riesgo microbiológico para el personal de la central.
La aplicación de estos protocolos debe realizarse de manera continua a lo largo de toda la campaña. Aunque el inicio de la campaña es el momento ideal para llevar a cabo planes de limpieza y desinfección en profundidad en todas las áreas del almacén, es importante destacar que los protocolos deben ser dinámicos y adaptarse a los distintos momentos de la campaña, así como a los parámetros e indicadores del estado higiénico de la central, como la contaminación microbiológica y el estado de las resistencias a fungicidas. Citrosol ha establecido unos límites críticos que guían el Plan de Actuación en función de estos indicadores.
Para garantizar su correcta aplicación y la obtención de los mejores resultados, todo protocolo de L+D debe constar de los siguientes pasos:
- Preparación del entorno, instalaciones y equipos: Es fundamental asegurarse de que no haya fruta en los equipos, cámaras o áreas a limpiar, y que no haya tránsito de personas en las zonas donde se realizará la limpieza. La L+D debe llevarse a cabo con agua potable, y los equipos de limpieza deben estar en buen estado.
- Limpieza inicial: El primer paso consiste en eliminar la materia grosera. A continuación, se procederá a limpiar las diferentes zonas aplicando correctamente los detergentes y productos de limpieza. Para ello, CITROSOL recomienda los siguientes detergentes concentrados desengrasantes: BELTCLEAN-S y BELTCLEAN-F para su uso en el volcador y la línea de confección; FNG CLEANER, de carácter muy ácido y baja espuma, ideal para la eliminación de restos de fungicidas del drencher, la línea y envases de campo; BRILI, un detergente alcalino especialmente recomendado para la limpieza de cajones; los detergentes desinfectantes: BETELENE OX25 FOAM, un detergente desinfectante espumante basado en ácido peracético, que permite una limpieza y desinfección en profundidad de la línea, y DECTOCIDE CDB, un detergente desinfectante alcalino para uso diario en máquinas limpiadoras de suelo.
- Enjuagado: Es necesario realizar un aclarado con agua limpia para eliminar los restos de detergente y suciedad.
- Desinfección: Para la desinfección de los distintos ambientes, CITROSOL dispone de una gama de biocidas que incluye desinfectantes de amplio espectro, tales como: OXA-BIOCID ECO (a base de glutaraldehído); QUACIDE PQ60 EC (a base de aminas terciarias y biguanidas poliméricas); MIDA SAN 334 MF (desinfectante hidroalcohólico) para su uso mediante nebulización y/o pulverización en línea y cámaras. Para la desinfección del drencher y de cajones, Citrosol recomienda el desinfectante a base de peróxido de hidrógeno GREENCARE-PH. Para completar la desinfección, recomendamos utilizar el bote fumígeno FUMISPORE, una formulación de ácido glicólico con acción fungicida y bactericida para su aplicación en todas las zonas del almacén en ausencia de fruta.
- Enjuagado final: En superficies en contacto con frutas, es necesario retirar el desinfectante aplicando abundante agua para evitar la migración de residuos del biocida al alimento.
Por último, es importante recordar que los productos deben ser aplicados por personal correctamente formado. Es fundamental leer detenidamente la ficha técnica y la ficha de seguridad del producto, así como utilizar los elementos de protección personal (EPP) adecuados para cada caso.