Con la llegada del frío y las borrascas de invierno, muchos talleres, naves industriales, almacenes o pequeños centros de producción padecen las bajas temperaturas en su interior debido al cierre exterior, el cual consiste generalmente en una única
puerta basculante (pre-leva) o seccional que permanece abierta durante toda la jornada laboral. No obstante, hay una solución muy asequible.
Combinar la puerta exterior con una puerta rápida puede suponer una mejora importante en la empresa respecto a la calidad de vida en el trabajo y en eficiencia energética. Las puertas rápidas de lona son flexibles, resistentes y
su instalación no afecta a la puerta ya existente. Su rapidez de acción
reduce las corrientes de aire y las pérdidas de temperatura. Estas puertas están diseñadas para
usarse de forma intensiva tanto en interior como exterior y soportar cargas de viento.
El diseño de la lona de la puerta se puede personalizar para llamar la atención de los clientes o simplemente indicar que están abiertos. Además, la
apertura automática facilita la fluidez de paso eficazmente y con total garantía de seguridad.
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ÁNGEL MIR, fabricante de puertas y equipamientos logísticos desde 1967.