Buenos resultados en tomate cherry y arándano
Actualmente,
AGROSTA trabaja en estudiar la aptitud de las vibraciones de baja frecuencia para medir la firmeza en frutas.
Para ello, se coloca un sistema piezoeléctrico debajo de la muestra y un micrófono de alta sensibilidad, del otro lado de la fruta a analizar. A continuación, se presiona de acuerdo con una fuerza calibrada (usando un peso calibrado).
Se han obtenido resultados muy alentadores en arándano y tomate cherry. El disco piezoeléctrico hace vibrar la fruta mientras que el micrófono mide la intensidad del sonido. La empresa ha diseñado y montado un soporte para aplicar el micrófono de acuerdo con una presión constante (aproximadamente 300 gramos). Se trata de un análisis no destructivo, excepto en frutas muy maduras.